Surprise [Privado Lovino]

- Pues... el tener como amigo a cierto Albino que no sabe donde deja sus cosas es una gran ventaja, ¿no crees? -lo miró sonriente- Podríamos jugar al nervioso... pero... Con apuestas... -miró de reojo las cartas- Digo, para hacer el juego más interesante~

y-y que tipo de apuestas??...-miro interrogante, la verdad no tenia mucho que apostar sus cosas las había dejado en el salón, solo tenia su celular su billetera y unas cuantas tonteras mas- no tengo mucho que dar bastardo...

-Le dirigió una corta mirada, sonriendo "inocentemente"-
- No lo sé, solo por ser tú, te dejaré elegir el tipo de apuestas... ¿O quieres que elija yo? Porque el jefe no tiene problema en escoger~ -Había terminado de repartir las cartas con habilidad, por lo que dejó absolutamente todo lo que venía a disposición del Italiano- Venga, diga lo que sea, os no perdeis nada~ -habló en su sensualmente (?) entonado acento español- Tampoco tengo mucho que ofrecer para vuestras peticiones, tengo... -se revisó sus bolsillos y su bolso- Tengo... calificaciones reprobadas, os sirve de algo~? Ah~! Tambien tengo lápices, y... -siguió buscando hasta que encontró algo muy curioso. Tomó una hoja de cuaderno, y escribió en ella: "Propiedad de Francis Bonnefoy" con letra grande, y en el medio de la hoja puso alrededor de 5 condones, era lo que le había alcanzado en el puño, los demás los guardó para hacerle la vida imposible al Francés. Los envolvió con la hoja, y los tiró cuidadosamente por la ventana de la biblioteca que daba al patio, siempre cuidando que no lo vieran- Para que aprenda a ser ordenado, joder -volvió a donde estaba Lovino con una sonrisilla un tanto cómplice, y lo miró, esperando a que él dijese algo más productivo que él- Como os he dicho, teneis el derecho de decidir, ya que yo no tengo buenas calificaciones como tú, no soy tan brillante como Lovi, aunque yo sea el Jefe, jamás sería tan brillante como Lovi-chan~ -volvió a sonreír, mirando tiernamente a aquel Italiano que, con una carita de confundido, era capaz de mantener la atención del Moreno toda la tarde que les quedaba- Por cierto, Lovi... ¿Cómo saldremos de aquí? Después de clase, nos verán los auxiliares, y nos acusarán...~ -RECIÉN avisó el español-

q-que diablos tiraste por la ventana bastardo?...-pregunto algo curioso- y-yo no se que diablos podemos apostar... como te dije idiota no tengo nada mas que mis cosas personales y dinero pero eso jamas lo apostaría-frunce el seño enojado- AHORA DICES ESO BASTARDO!!! CREÍ QUE YA LO HABÍAS PENSADO!!! -exaltado y enfadado- SABIA QUE ESTO SERIA UNA MALA IDEA!... maldición...

- Lovi~ ¿Acaso recién te vienes dando cuenta~? Deberías haberlo pensado antes~ -e le acercó y lo abrazó- ¿O es que acaso no te ha gustado pasar una tarde con el jefe~? -Le susurró, y sin dejar de abrazar al italiano, esperando la respuesta de éste- Pensé que haciendo una pequeña travesura nos relajaríamos juntos, después de todo, éste día quedará en mi memoria como el más hermoso de todos, ¿No crees, Lovi~?

Y-ya me había dado cuenta antes es solo que creí que tenias un plan para después salir bastardo!! -De repente siente que el Español lo abraza, y comienza a ponerse algo nervioso- N-No me abraces maldición!...-sonrojado- C-CLARO QUE ME A GUSTADO!...-dice sin querer dejando oír sus sentimientos, sonrojan doce mas a un- Maldición...-susurra- O-OLVIDA LO QUE DIJE BASTARDO!...-escondiendo su rostro-

-El español rió ante el sonrojo del Italiano, definitivamente Lovi no era tan bueno para esconder las cosas que siente después de todo, pensó, y se quedó observandolo por un momento, era su querido Italiano en máxima expresión de ternura. No sabía si actuar como un pervertido o simplemente mantenerlo en el regocijo de sus brazos, pero cuando al ver al menor, comenzó a sentir, que lentamente, su corazón bombeaba más fuerte, decidió mantenerse ahí, observándolo- No está mal que pienses que hoy fue el mejor día de todos, Lovi~ -Lo abraza, y deja que el castaño se esconda en su torso- No entiendo por qué escondes aquel sonrojo que tiñe tus mejillas hasta dejarlas como pequeños tomatitos, si te ves tan hermoso así~ -sonrió alegre- Por cierto, ¿Que harás si no olvido lo que dijiste~?

-Lovino se esconde en el pecho del español sintiendo que su corazón se le saldría en cualquier momento estaba completamente nervioso y no podía mantenerse tranquilo al lado del mayor- c-calla... -dice con voz temblorosa- n-no soy un tomate m-maldición...-susurro aun con voz temblorosa- s-si no lo olvidas te mato maldición...

-El español volvió a sonreir, y tomó lentamente al menor del mentón, para acercarse a su oído- Puedes matarme, descuartizarme, y luego vender mis pedacitos por E-bay, pero nada, absolutamente nada me dolería más que me quitaras tu amor, auqle amor que me brindas desde aquí -tomó la mano del Italiano, y junta a la de él, la llevó hacia el pecho del castaño, específicamente donde se ubicaba el corazón- Y es por eso que soy incapaz de olvidar aquello que dijiste~

m-maldición... como diablos crees que aria eso bastardo... j-jamas te aria daño... -deja que el Español manejara su mano llevándola al corazón de este- y-yo jamas d-dejare de amarte... bastardo...-susurro apartando su mirada- jamas...

-sonrió, su felicidad era notoria- No sabes lo feliz que me haces al decir esas cosas, Lovi~ El jefe se siente extremadamente bien a tu lado~ Y es por eso que eres lo mejor que me ha pasado en toda mi vida de jefe~ -Se le acerca lentamente y le otorga unos cuantos besitos tímidos y suaves en la mejilla-

t-tu también e-eres l-lo mejor que me a pasado... -sonrojado, recibiendo los tímidos y cálidos besos del mayor- i-idiota...-susurra para luego darle un tímido pero amoroso beso en los labios-

-Correspondió suave y lentamente aquel beso que el Italiano le había otorgado, sintiendo cada vez más cosas nuevas en su interior, y agrandando el cariño que tiene por él, mientras que sus manos se encontraban en los hombros del menor- Tú me tienes así de idiota~ Cada vez que miro tus ojos me pongo más idiota por tí~ por lo que yo, como jefe, puedo decir que parte de mi forma de ser... casi toda mi forma de ser es a causa tuya~ Osea, que el jefe tiene como dueño a Lovi~ -sacando una conclusión ciertamente estúpida, siguió abrazando al menor, feliz, estando seguro que aquella sensación que sentía en estos momentos no la sentiría con nadie más que aquel italiano que le había robado el corazón-

-Feliz por las palabras que no esperaba del Español, se sonrojo y no pudo evitar sonreír levemente- d-de verdad que eres un idiota...pero -baja la mirada- gracias a ti... ya no me siento solo ni inútil... jamas pensé que alguien me pudiera querer de esa forma... Feliciano siempre se llevaba los elogios, jamas me lleve bien con la gente... pero cuando te conocí al fin sentí que alguien me admiraba y quería a mi no a Feliciano...p-por eso grazie mille... grazie por hacerme sentir que le importo a alguien... bastardo...

- Todos elogian a Feliciano porque jamás han sabido ver la vida de otra forma, como yo la veo, son todos iguales, jamás han visto más adentro que un cara linda... Que por cierto, belleza te sobra.. -sonrió- Pero el que la gente no te comprenda por ser toda de pensamiento igualitario, no debe hacerte sentir inútil, eres una de las personas más maravillosas de todo el mundo, y tu caracter simplemente se debe a tus problemas pasados anteriormente... Y pasa eso estoy yo, para ayudarte en todo lo que necesites, para ayudarte a superar tus problemas, para consolarte en tus caídas y apoyarte en tus victorias, y para descubrir aquella hermosa sonrisa, tesoro que muy pocos hemos sido afortunados de ver... -sonrió, y se mantuvo un rato corto acariciando el rostro del menor, observándolo con sutileza y delicadeza-

- Todos elogian a Feliciano porque jamás han sabido ver la vida de otra forma, como yo la veo, son todos iguales, jamás han visto más adentro que un cara linda... Que por cierto, belleza te sobra.. -sonrió- Pero el que la gente no te comprenda por ser toda de pensamiento igualitario, no debe hacerte sentir inútil, eres una de las personas más maravillosas de todo el mundo, y tu caracter simplemente se debe a tus problemas pasados anteriormente... Y pasa eso estoy yo, para ayudarte en todo lo que necesites, para ayudarte a superar tus problemas, para consolarte en tus caídas y apoyarte en tus victorias, y para descubrir aquella hermosa sonrisa, tesoro que muy pocos hemos sido afortunados de ver... -sonrió, y se mantuvo un rato corto acariciando el rostro del menor, observándolo con sutileza y delicadeza-

grazie Antonio...-susurro con algunas lagrimas saliendo de sus ojos- grazie por entenderme, por apoyarme, por cuidarme, por no abandonarme, por ser mi amigos, por creer que no soy menos que Feliciano... y lo principal... Grazie por amarme bastardo!- se lanza a abrazarlo aun con lagrimas pero feliz por lo que el mayor le había dicho- ti amo, ti amo, ti amo maldición!...

- No tienes nada de que agradecerme, puedo jurarte por lo que tu quieras, que haría cualquier cosa por tu felicidad... y por tenerte así, junto a mí, con aquella tranquilidad de saber que jamás te irás de mi lado, te haría feliz 1.000 veces sin siquiera pensarlo~ -lo abrazó, y logró sentir aquella fragancia característica del italiano, algo indescriptible para él, algo que lo volvía loco, algo que podía mantenerlo abrazado al castaño de por vida- de hecho... -le habló al oído sin dejar de abrazarlo- gracias a tí por ser capaz de soportar a este idiota de jefe, a este bastardo molestoso que te ama más que a cualquier cosa en el mundo, gracias por aguantarme, Lovi~ -le sonrió ampliamente-

-Ríe levemente- si que eres un idiota bastardo... jamas m-me molesto tu forma de ser... s-solo era q-que jamas nadie me había tratado de esa forma... e-eso era nuevo para mi y... no sabia como tratarte... ademas... esos malditos sentimientos no me dejaban en paz y no los lograba entender...-baja la mirada- Ha maldición bastardo por que diablos me estoy confesando contigo!!!-exclamo con el seño fruncido-

- Te confiesas conmigo porque sabes que el jefe ama cuando te pones así de tierno, y cuentas lo que no eres capaz de contarle a la gente, me haces sentir todo un afortunado al verte sonrojado, ¿sabes? -lo abrazó muy cariñosamente- Siempre anhelé tenerte así de cerca, en algunos momentos pienso que todo esto es un sueño... Y si llegara a ser de aquella manera, créeme que no me gustaría despertar~

y-yo no me pongo tierno y no estoy sonrojado -grito a la defensiva -p-pues te demostrare que no lo es bastardo -le da un piñiscon en la mejilla- vez... -mirándolo frente a frente sintiendo como su corazón se aceleraba al ver esos ojos que tanto amaba y claro que jamas admitiría.

-rió levemente ante el pellizcón del Italiano, raramente no le dolió... Tanto- Hahah~ tienes fuerza, Lovi~ Pero nunca tendrás la fuerza del jefe~ -El mayor lo elevó hasta lo máximo que pudo, tal y como a un bebé- Eres liviano, Lovi~

pues claro que tengo fuerza bastardo... soy un hombre...-El Italiano se sonroja por lo que el Español había hecho- mi ha messo giù io non sono un bambino bastardo!!! -moviendo-ce-

-El español no entendió en lo absoluto lo que había dicho el italiano, por lo que siguió sonriendo, y viendo como el italiano reclamaba, según él. Esperó un poco, lo bajó y le robó un tierno y corto beso de sus finos labios, cosa que silenció al menor- Pues yo te lo digo en este y en todos los idiomas que algún día llegaré a saber como Jefe: Te ves adorablemente hermoso reclamándome~ Y eres tan lindo cuando hablas en Italiano y el Jefe no entiende ni un carajo~ -sonrió otra vez-

se sonroja por el beso del mayor, logrando hacerlo callar- idiota...-susurro desviando la mirada- eres un jodido idiota! maldición! como se te ocurre callarme de esa forma es que no te enseñaron modales bastardo! a-ademas... e-esa no es forma de callar a una persona! -continuo reclamando-